Incumplimiento de promesas

Caracteriza, en mi opinión, a nuestra época la perfección de medios y la confusión de fines. (Albert Einstein)

Lejos quedan ya las vacaciones estivales y sus placidos y tardíos despertares, el otoño esta en el calendario y el frío llamando a nuestras puertas. La secuencia estacional es tozudamente insistente, como la realidad política de nuestro País, donde poco o nada cambia a pesar de que aquí y allá, las tormentas sigan mojando a los más desprotegidos.

El incumplimiento de las promesas, continua minando, la ya de por si escasa confianza de los ciudadanos en sus instituciones, pero cuando este incumplimiento afecta a los mas débiles, la situación pasa de ser una cuestión de calidad democrática a ser un problema de justicia social.

La estrategia negacionista basada en la manipulación y la mentira, fue y sigue siendo ejercida por nuestros dirigentes con el único y egoísta objetivo de ganar las elecciones. La crisis nos afecta a todos con distinta intensidad, pero el engaño de la no-crisis, ha afectado solo a los mas débiles, los menos informados y a los desinformados, entre los que se encuentran los que entienden la ciudadanía como un acto de fe ciega para con sus representantes.
Lamentablemente, cuando aun corría el mes de abril, y mientras el gobierno vestía con el suave velo de la desaceleración cíclica a toda una Doña Crisis, había quien se acercaba a comprar un piso que casi no podía pagar, o a adquirir maquinaria para fabricar productos que no podrán vender para sus empresas capitalizar, los salarios pagar y sus impuestos liquidar, todos ellos engañados por los surrealistas e interesados discursos que emanaban de la moncloa.

Sus mentiras, engaños y su falta de sensibilidad con los mas débiles, están quedando también en evidencia estos días, cuando después de asegurarnos a bombo y platillo, que los mas desprotegidos serian los mas protegidos, nos enteramos que en los presupuestos generales del estado para el 2.009 se reducen entre un 25 y un 40 % las pensiones por enfermedad e invalidez de los funcionarios que hallan trabajado menos de 20 años. Como ya hicieron hace unos meses cuando, discretamente y sin ruido, limitaron el derecho de los divorciados y separados a percibir una pensión por viudedad. Una vez mas queda claro que el PSOE dice una cosa y hace otra, promete defender a los más débiles y castiga a los enfermos, los incapacitados y a las viudas y viudos.

La crisis también ha dejado en evidencia la falsedad del discurso del gobierno de ZP en un tema tan sensible como la inmigración. Nos decían que la política de inmigración del PSOE se basaba en la capacidad de acogida y de solidaridad de nuestra sociedad, de nuestro País. Pues tampoco, a la hora de la verdad se han quedado en eso, en palabras que se pronunciaban de cara a la galería. Hace unos días escuchábamos al ministro Corbacho, decir con claridad meridiana que la inmigración dependía de nuestro mercado de trabajo, y que solo este iba a regular los flujos migratorios hacia nuestro país, convirtiendo la inmigración en una cuestión de mercado, y a los inmigrantes en simple mano de obra. Donde ha quedado la solidaridad y las políticas de acogida. Lo único cierto es que tras bellas declaraciones pre-electorales se escondía una política tan o mas economicista que la del PP o los nacionalistas.

Como siempre, desde que se formaron mares y continentes, aparecieron los primeros organismos unicelulares que devinieron en peces que a su vez se convirtieron en reptiles y así hasta el homo sapiens, los mas débiles y los que no gozaban del favor de la inteligencia y el capital, son los mas puteados, y a la vista de las ultimas decisiones del gobierno, ahora hay que añadir los que no tienen el favor de la administración o del mercado.
La insensibilidad del gobierno para con los más desfavorecidos, consecuencia de su falta de moralidad, y de su manifiesta incapacidad de gestión, nos ha de preocupar a todos, y muy especialmente a los que describe la etimología oficial como: las rentas mas bajas, pues ya, ni con sus bellas palabras se podrán alimentar.

Los que estamos por la rendición de cuentas y actuamos en consecuencia al depositar nuestro voto, los que creemos que el estado ha de ser moralmente fuerte, los que anteponemos la racionalidad y el espíritu critico a la fe ciega, los que defendemos que una escolarización y una sanidad universales, gratuitas y de calidad, han de ser prioridades en la acción de un gobierno democrático, los que exigimos una administración al servicio del ciudadano y creemos que el cumplimiento de la Constitución y las leyes es la mejor garantía para que la libertad y la igualdad de oportunidades sean efectivas, estamos especialmente indignados, no entendemos como una vez que ZP y el gobierno, por fin dieron carácter oficial a “la crisis”, poco o nada haya cambiado en su actitud frente a las consecuencias socio-económicas que conlleva, pues sus prioridades siguen siendo inversas a las de los ciudadanos.

Los que estamos con C’s, no estamos obsesionados con la lengua ni con el nacionalismo, como dicen algunos, en todo caso, lo estamos con la libertad, la justicia y la igualdad de oportunidades “para todos”.