La buena memoria a veces es un obstáculo al buen pensamiento.
(Friedrich Nietzsche)
Los cambios en los parlamentos y gobiernos de Galicia y el País Vasco ya empiezan a escenificarse y a darnos las claves de esta nueva realidad tanto tiempo anhelada por los que estamos ahítos de imposiciones identitarias y dictaduras culturales, por los que estamos jartos de que los recursos públicos se dediquen prioritariamente a la construcción de nuevos estados en lugar de al bienestar y la felicidad de los ciudadanos, por los que trabajamos para que se abra paso una nueva forma de hacer política que anteponga el interés de los ciudadanos al de los partidos políticos.
Para los que defendemos la constitución de la que democráticamente nos hemos dotado, como la piedra angular sobre la que se sustenta la convivencia de los que habitamos este fantástico pedazo de tierra que es España, el paso a la oposición de los partidos nacional-separatistas, especialmente en el caso de las tierras vascas era ya un problema de salud e higiene democrática, tras mas de 20 años consecutivos en el poder.
La elección de Arantza Quiroga como presidenta del parlamento vasco gracias a los votos del PSE y del PP es una realidad que hemos de celebrar; sin embargo no todo es alegría y fiesta: El voto en blanco de la plataforma que lidera Rosa Diez es un detalle revelador que empaña el optimismo con el que algunos ven a esta formación política y confirma el escepticismo con el que otros seguimos sus pasos; un agridulce voto en blanco que puede saber mal a muchos, pero no sorprender.
La lista de contradicciones entre los hechos y los discursos de los impulsores de esta plataforma, es tan larga como dilatada la carrera política de su líder, mas no os voy a aburrir con ella pues para eso están las hemerotecas.
Frente a tanta contradicción, unos opinan que es de sabios rectificar y otros que tanto cambio suena más a oportunismo que a sabiduría. Unos lo llaman evolución y otros nos tememos que no es más, que más de lo mismo.
Votar en blanco es una opción que día a día va cobrando fuerza entre el electorado mas escéptico para castigar a la Partitocracia. Un electorado cada vez más harto de que los políticos antepongan la defensa de sus chiringuitos, frente a los intereses de los ciudadanos que los han votado.
Sin embargo una creciente parte de la ciudadanía se inclinó por votar a un partido oportunista nacido a la sombra de Ciudadanos: el partido de Rosa Diez, creyendo que votaban por una nueva forma de hacer política que Ciudadanos pregona y lo que es más importante: Práctica, y a los hechos me remito.
Las explicaciones de Gorka Maneiro, el nuevo diputado de la plataforma de Rosa Diez en el parlamento vasco, justificando su voto en blanco: “Si nos hubieran llamado y explicado la nueva forma de funcionar, quizás nuestro voto hubiera sido otro”, son un claro ejemplo de que UPyD practica la misma política que dicen querer combatir. Estas declaraciones anteponiendo egoístamente un “no han contado conmigo” al interés general y a la manifiesta voluntad de sus votantes para que apoyaran a la candidata “constitucionalista” frente a la opción “separatista”, son un ejemplo mas, de más de lo mismo.
Los votos afirmativos de un PP prisionero de su realidad nos han dado un respiro mientras que el voto en Blanco de Gorka Maneiro es una ducha de agua fría para los que apostamos por la necesidad de una autentica regeneración democrática que hoy por hoy solo defiende contra viento y marea, con hechos mas que con palabras, un vigoroso partido llamado Ciudadanos.
(Friedrich Nietzsche)
Los cambios en los parlamentos y gobiernos de Galicia y el País Vasco ya empiezan a escenificarse y a darnos las claves de esta nueva realidad tanto tiempo anhelada por los que estamos ahítos de imposiciones identitarias y dictaduras culturales, por los que estamos jartos de que los recursos públicos se dediquen prioritariamente a la construcción de nuevos estados en lugar de al bienestar y la felicidad de los ciudadanos, por los que trabajamos para que se abra paso una nueva forma de hacer política que anteponga el interés de los ciudadanos al de los partidos políticos.
Para los que defendemos la constitución de la que democráticamente nos hemos dotado, como la piedra angular sobre la que se sustenta la convivencia de los que habitamos este fantástico pedazo de tierra que es España, el paso a la oposición de los partidos nacional-separatistas, especialmente en el caso de las tierras vascas era ya un problema de salud e higiene democrática, tras mas de 20 años consecutivos en el poder.
La elección de Arantza Quiroga como presidenta del parlamento vasco gracias a los votos del PSE y del PP es una realidad que hemos de celebrar; sin embargo no todo es alegría y fiesta: El voto en blanco de la plataforma que lidera Rosa Diez es un detalle revelador que empaña el optimismo con el que algunos ven a esta formación política y confirma el escepticismo con el que otros seguimos sus pasos; un agridulce voto en blanco que puede saber mal a muchos, pero no sorprender.
La lista de contradicciones entre los hechos y los discursos de los impulsores de esta plataforma, es tan larga como dilatada la carrera política de su líder, mas no os voy a aburrir con ella pues para eso están las hemerotecas.
Frente a tanta contradicción, unos opinan que es de sabios rectificar y otros que tanto cambio suena más a oportunismo que a sabiduría. Unos lo llaman evolución y otros nos tememos que no es más, que más de lo mismo.
Votar en blanco es una opción que día a día va cobrando fuerza entre el electorado mas escéptico para castigar a la Partitocracia. Un electorado cada vez más harto de que los políticos antepongan la defensa de sus chiringuitos, frente a los intereses de los ciudadanos que los han votado.
Sin embargo una creciente parte de la ciudadanía se inclinó por votar a un partido oportunista nacido a la sombra de Ciudadanos: el partido de Rosa Diez, creyendo que votaban por una nueva forma de hacer política que Ciudadanos pregona y lo que es más importante: Práctica, y a los hechos me remito.
Las explicaciones de Gorka Maneiro, el nuevo diputado de la plataforma de Rosa Diez en el parlamento vasco, justificando su voto en blanco: “Si nos hubieran llamado y explicado la nueva forma de funcionar, quizás nuestro voto hubiera sido otro”, son un claro ejemplo de que UPyD practica la misma política que dicen querer combatir. Estas declaraciones anteponiendo egoístamente un “no han contado conmigo” al interés general y a la manifiesta voluntad de sus votantes para que apoyaran a la candidata “constitucionalista” frente a la opción “separatista”, son un ejemplo mas, de más de lo mismo.
Los votos afirmativos de un PP prisionero de su realidad nos han dado un respiro mientras que el voto en Blanco de Gorka Maneiro es una ducha de agua fría para los que apostamos por la necesidad de una autentica regeneración democrática que hoy por hoy solo defiende contra viento y marea, con hechos mas que con palabras, un vigoroso partido llamado Ciudadanos.
“Vale más un desengaño, por cruel que sea, que una perniciosa incertidumbre”
(Francisco de Paula)
Nito Foncuberta
Nito Foncuberta
3 comentarios:
Pues vaya regeneración democrática que va a defender C's, si cree que hay que votar a favor de cosas que nadie ha explicado. Sí señor, lo importante son los nombres y no las políticas, claro que sí.
Brillante y descarnado análisis Nito.
Ni diestro ni siniestro: sólo qué hay de lo mío.
Publicar un comentario