Comentarios colaterales sobre el nuevo gobierno III

Desde el pasado marzo, busco algo optimista que escribir sobre el gobierno, y más concretamente sobre los nuevos ministros, ministras y ministerios. Como cualquier Ciudadano que no practique la castrante doctrina del “Anti-tú”, he dejado pasar mas de 100 días antes de conformarme una opinión; tiempo en el que he tratado de alejarme de prejuicios, que especialmente los recién llegados, en justicia, no merecían.
Hoy me animo a escribir después de ver y oír, por fin, a un ser creíble: Cristina Garmendia. Sin embargo, y antes de escribir sobre la Ministra de Ciencia, Innovación y Tecnología, me referiré a las otras novatas pues estoy cansado de silencios complacientes, consciente de que podría ignorarlas, pero ni eso merecen.

A Carmen o Carme, da igual, y a la flamante ministra de “la” y por “la igualdad”, las hemos visto presidiendo desfiles y cabalgatas del arco iris, visitando pacíficos destacamentos militares y otros colectivos de buen rollo, siempre acompañadas por una pléyade de fieles reporteros del corazón que día tras día documentan su trascendental actividad, habiéndonos dejado constancia fotográfica del valiente embarazo de la Angelie Jollie del zapaterismo y de la mas firme defensora de babilonia, recordándole al mundo que “Spain sigue siendo diferent”.
Desde Afganistán a Chueca han pasado revista a nuestras tropas de ayuda humanitaria y encabezado celebraciones y carnavalescas ruas, llenas de color, orgullo y testosterona. Sus fotos han inundado la prensa rosa, transmitiendo a sus lectores la modernidad moral del zapaterismo y a los que no estamos en el rollete, la imagen de un pulpo en un garaje, y como diría el chiste, admito pulpo como animal de compañía, como la cabra lo es de la legión y la mariposa de la Polinesia. ¿Que estará haciendo una chica como yo en un sitio como este?, parece que piensan a veces. Como Doña. Leticia, tan cercanas y tan normales, tan nuestras.

Y mientras tanto, la España de Zapatero, doblando sus exportaciones de pacificas minas anti-persona, inofensivas bombas racimo y otras chucherías que son usadas aquí y allá en guerras que no existen, y como no, produciendo los mejores juegos gays de la historia del mundo mundial.

Como decía al principio, la luz que me ha motivado a retomar estos, mis comentarios colaterales, ha sido la primera comparecencia en televisión de la Ministra de Ciencia, Innovación y Tecnología. El feliz acontecimiento, se produjo hace unas semanas en el programa de TVE, 59 segundos.

Persona de innegable preparación y excelente currículo, idóneo para su nueva responsabilidad, estuvo ágil y pragmática en sus intervenciones, demostrando una cintura que me sorprendió gratamente. En lo superficial, tiene buenos modos y excelente aspecto, su oratoria pausada, de timbre y tono convincentes, es didáctica, bien estructurada, capaz de proyectar la confianza que este gobierno es incapaz de transmitir a los que no creemos en la alquimia.

No se amedrento ante cuestiones como la interrupción voluntaria de embarazo y el derecho a una muerte digna. Sus palabras se alejan de la hipocresía dominante también en temas como los recursos naturales y energéticos: los transgénicos, la energía nuclear y sus alternativas, llamando al dialogo y al debate desde la responsabilidad.
Ni una vez uso las palabras progresista y sostenible, reconduciendo sin inmutarse alguna que otra embestida paranoica de un progre de salón, sin moverse de su sitio, desquiciando al novillo.

Con una sólida formación científica, esta Española y Vasca para mas señas, que habla varias lenguas y sus hijos estudian chino, diagnosticó como un mal endémico el problema de las lenguas en España, e inteligentemente afirmo que las universidades tendrán que ser mas competitivas, tanto a nivel nacional como internacional, y que el debate se tenia que plantear sobre ¿Cómo afrontaremos el reto de la competividad en el ámbito académico, en la investigación y la universidad en el futuro?, cuando mientras las mejores universidades europeas ofertan cursos en ingles, nosotros nos desocupamos discutiendo si tienen que impartirse en lenguas de gran demanda internacional, como el Catalán, el Gallego o el Euskera.

Desgraciadamente su ministerio no tiene casi competencias lingüísticas ni educativas, salvo en lo concerniente a investigación y becas, sin embargo, dejo claro que uno de los retos del programa “Universidad 2.010” es situar algunas universidades españolas entre las 100 primeras del mundo, actualmente allende del puesto 200, y que para lograrlo, premiara a las que se apunten al sentido común, a las que primen la excelencia y el currículo de su profesorado, sobre los irritantes niveles “C” de idiomas locales.

No se si este lamentable retraso en la aparición de esta rara avis entre tanta avis horribilis, es fruto de la casualidad o de la planificación, y estando el PSOE en el gobierno me inclino por lo segundo.
ZP ha decidido que, ahora si estamos en “crisis”, eso si, por culpa del mundo que no le hace caso, de los demonios americanos que no planifican debidamente su economía, y del Sr. Desaceleración, hijo de Don Capital y Doña Ciclos, como otrora se acuso a judíos y masones, y ha puesto en marcha su macro-aparato mediático para apoyar la imagen de la reconversión de nuestra economía, subiéndonos a un tren al que hace años solo se subieron un puñado de empresas.

Ya para acabar me referiré a mis temores, pues la sacrosanta envidia esta asomando la cabeza. Voces desde su propio partido empiezan a atacarla, unos porque no es militante, otros no pueden tragar que gane menos hoy que ayer, sin olvidar a los que interpretan que no es lo suficientemente antisistema, vamos, que no cumple con los requisitos de la izquierda autentica, sin olvidar al “KOMINTERN”, pues tampoco responde al rodillo de la cuotas, las varonías y los caciques. Su no militancia y su no dependencia económica, juegan en su contra cuando deberían hacerlo a su favor. Solo se debe al gobierno, a ella, y a su familia naturalmente, dejando el bien surtido comedero del PSOE para sus voraces y ya exquisitos militantes.

Cuidadín ZP que esta chica piensa por si misma y como mucho callará, pero no la veo practicando el negacionismo visceral que propugnas.